jueves, 19 de agosto de 2010

Llevaba varios días pensando en postres sencillos y necesitaba ponerme a ello, así que preso de la ansiedad me fui el otro día a hacer la compra sobre la una de la madrugada (Madrid, Te amo) y aunque solo pasaba a comprar nata y huevos, terminé comprando melón, naranjas, helado, crème fraîche, azafrán y otras mil chorradas que tuve que cargar Ribera de Curtidores cuesta arriba.


Llegué a casa bañado en sudor y, previa ducha, me puse a hacer una crema de azafrán para probar con un melón a la plancha. Pensaba hacer un melocotón asado pero no tenía todos los ingredientes así que mientras tanto me puse a cocerlos con azúcar.

Al principio no me gustó el melón a la plancha, pues cambia completamente de sabor, pero lo he vuelto a probar y me va gustando. El melocotón me lo tomé peladito con un helado de macadamia y un poco de crème fraîche. No esta mal para ser la primera vez que me pongo con los postres. Habrá que seguir probando. Me voy a Can Alf.

sábado, 14 de agosto de 2010


Llevo varios días parado. Me han ofrecido montar un restaurante en Tomelloso, así que he dejado el restaurante donde estaba trabajando y estoy en proceso de cerrar la posada para abrirla en otro sitio.

Aproveché para disfrutar de unos días cumpliendo el sueño minero en La Unión, pero he vuelto y estoy comenzando a aburrirme.

Además intento pensar, repasar recetas, moldear un estilo, y ganar tiempo que me hará falta las próximas semanas.

Pasa el tiempo y comienzo a volverme loco. Por un lado, ya no tengo restaurante para aprender y cocinar y por otro la ciudad está vacía y me aburre cocinar para mi solo. Me pierdo en cines y librerías, pero el tiempo pasa lentamente.

La cabeza me explota. Mientras tanto suena el Agujetas por martinetes. Seguramente terminaré haciendo una crema inglesa a las cuatro de la mañana. Intentaré refugiarme en algún libro medianamente decente.

Me muero por probar con el melón a la plancha con crema de azafrán. ¿Alguien se anima?

viernes, 13 de agosto de 2010

Aprovechamos la final del mundial (¿todavía te acuerdas?) para preparar una lengua a la veracruzana. Con el caldo hicimos un arroz meloso con níscalos. Lloré de gusto como casillas con el resultado.