La otra noche caminaba con destino a la posada y sin motivo aparente, me entró una tristeza tremenda... hondísima... por la mañana me levanté mucho peor, abatido y sin ganas de nada.
Desgraciadamente, nada es para siempre y se me pasó con una Coca Cola bien fría y una bolsa de patatas fritas. Una pena, pero la vida es así.
Desgraciadamente, nada es para siempre y se me pasó con una Coca Cola bien fría y una bolsa de patatas fritas. Una pena, pero la vida es así.
Entre medias, pasé por el decadente e inigualable mercado de la cebada, mi mercado preferido, y en un puesto vi cangrejos de río vivitos. Como aún no sabía que los malos espíritus se irían con la chispa de la vida, pensé apagar el fuego interno con un buen arroz.
Resulta especialmente cruel decapitar los cangrejos aún vivos y pelar las colas que se retuercen en las manos viendo como las cabezas siguen luchando por sobrevivir entre las cáscaras de lo que será el mejor caldo de cangrejo.
Más de uno pensará que soy un sádico pero la vida es así. ¿O se piensan que los solomillos que venden por ahí son de vacas que han muerto de risa?
Seguro que los mismos se ponen morados a morcillas y butifarras sin el menor remordimiento. En fin.
El caso es que con el caldo, los cangrejos bien peladitos y los últimos guisantes de una primavera que se ha alargado más de lo previsto quedó un arroz buenísimo. Acompañado de un albariño fresquito y de buenos amigos, repetimos hasta rebañar la olla.
Aunque en el trabajo las cosas están calmadas y monótonas, he tenido tiempo de probar alguna cosilla nueva.
Desde verano tenía ganas de hacer estos dim-sum de cerdo y gambas que sirvieron de aperitivo en una cena de postín.
Pescado para el domingo. Gruesos lomos de salmón a la plancha con un poco de sal y pimienta. ¿Alguien se anima?
¡La pasta está de moda en la posada señora! ¡Pase y disfrute!
Riquísimos tagliatelle con almejas e hinojo.
Simple, rápido y delicioso.
Simple, rápido y delicioso.
La última vez me quedé con ganas así que fui por más flores de calabacín. Con un poquito de bacon, nata fresca y parmesano, enriquecieron estos fricellis.
¡Toma pan y moja! ¡que delicia!
Aprovechando sobras una noche un poco tonta parí estos espaguetis con chopitos y guisantes.
¿Que quiere más? ¿la envidia le corroe? ¡no se deje ganar por los malos instintos! pase por aquí, se admiten todo tipo de propuestas.
Hacemos take away y servicio a domicilio.







Casualmente paso por aquí justo después de echar un vistazo a este otro blog no apto para bulímicos:
ResponderEliminarhttp://foodordeath.tumblr.com/
Por cierto, qué buena pinta tenía ese arroz con cangrejos y guisantes.
La última receta que probé yo fue este arroz con champiñones y bacon:
http://www.youtube.com/watch?v=bhPu64MsUvk
Hasta me compré arroz jazmín para hacer la prueba, yo que nunca lo compro.
Ah, sí, que no se sabe quién es el topo.
ResponderEliminar¿Reconoces esta cara?
Joder, ¡que ansiedad! deberías aguantar la incógnita un poco más... pero claro, en Internet todo tiene que ser inmediato...
EliminarRoberto: Sí eres un sádico, jaja. Yo por eso soy vegetariana, porque igual sufre el cangrejo que la vaca.
ResponderEliminarSin embargo, debo confesar que se veía rico todo.
Te extraño siempre. A.
¡A la rica pasta! Ya me has dado hambre y acabo de desayunar.
ResponderEliminarEl presi